Autor: Gilberto Aranguren Peraza
Amanecen
las flores colgadas en las vidrieras
sus
abrigos cantan y se sosiegan
aumentan
las marcas en sus rostros
y
dejan extrañas a las memorias.
Un
astro mira la ventana
los
perros aúllan en secreto
y
los gatos juegan
con
el clamor angustiado de las aves recién nacidas.
Entonces
escribo
con
las alas de un colibrí
respiro
y brindo por los aires repletos
me
estaciono
con
un vaso de ron con chocolate
traficando
después de las diez
me
despido
de
esta agonía acurrucada en las esquinas
y
un adiós a los transeúntes.