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Esta foto tomada en el año 2019, estamos la amiga Liliam Córdova, mi persona y Milagros Figuera |
Estremecida hoy se encuentra La Isla Inquieta, por la desaparición física de la cantautora Milagros Figuera. Nuestra querida Milagros partió para encontrarse con nuestro creador. Se fue a llevarle su canto y su voz de contralto con la que inundó los espacios que visitaba.
Milagros y el que suscribe se conocieron en el año de 1981, cuando estudiábamos en la Escuela Técnica Julio Calcaño en Catia en la ciudad de Caracas, desde entonces nos convertimos en dos amigos muy amantes, respetuosos uno de otro, pero también crítico y consoladores. Fue y será por siempre una gran hermana. La última vez que hablamos, que fue hace tres semanas atrás, me habló de este momento, de lo que para ella era su entrega definitiva al Cosmos. Nos despedimos vía video llamada, sabíamos que un nuevo encuentro era tal vez improbable. Hoy la lloro, con una tristeza muy grande por su partida y con el mayor deseo de que esté al lado de nuestro creador cantándole sus coplas y enseñando a los santos a tocar guitarra, bandola y cuatro.
Desde este rincón del planeta le envío mis saludos a la familia Figuera, a su hermana May, a su tía, a su prima Marjorie, y a sus sobrinas.
La música venezolana hoy está de luto por esta pérdida irreparable.
Milagros, ruego a Dios para que te reciba con ese inmenso amor que siempre supiste dar cuando con nosotros estuviste.
Te amo mucho y que Dios te bendiga.
Gilberto Aranguren Peraza
La Isla Inquieta
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