Autor Gilberto Aranguren Peraza
“Me
he puesto a recordar los días
de
verano idos, tu entrar y salir
poca
y harta y pálida por los cuartos”
César Vallejos
Trilce XV
La lluvia
en silencio
avisó lo jamás
dicho
por las almas
agrestes
en la
sinuosidad de las tardes.
Sin anunciar
el regreso
sabiendo del
abandono
buscando el
miedo
encontraste
a la muerte.
Te fuiste
descalzo
sin
preguntas
sin gritos
ni fotografías.
Así
siempre supe de tu color
de la
seducción obstinada
con las
calimas de verano
el
cigarrillo en la boca
el
aliento de mil borracheras
y la
puerta extraña
abierta
en el zaguán
con
oscuras noticias.
Acuérdate
de la
paliza en la calle
no te
abrí la puerta
estaba
encerrado con mis secretos
tus odios
pudieron más
hasta el
punto de convertirse en los míos.
Todo
aquello se detuvo cuando
viste
espantado el hilito de sangre
amarrado
al palo en el centro del patio.
Pero llamaste
a la puerta
y no
contesté
seguiste
tocando hasta tocar todas las puertas
nadie te
escuchó
sólo eras
un breve rumor.