La Mariposa

"Con cuánto esfuerzo en tinieblas 

el gusano se esculpió en flor

La luz vistió su fealdad 

con la belleza de una moda que nunca pasa de moda"

José Emilio Pacheco

Mira cómo se bambolea el lepidóptero que no duda de su belleza para sorprender a la flor

De paseo por el jardín inocula su voz sencilla desnudando el recodo

donde su silueta perfecta intenta imitar a las Vestas.

Su cuerpo transmutado se queda en el aire

porque en el pasado fue gusano infectado para convertirse en suspiro agónico

ahí, en mi pecho donde se aquietan sus angustias 

se cargan los colores que conmueven a la muerte.

Se esconde en el árbol para reírse de las otras

dejando el cruce de una rama en mis ojos.

Su seda se desliza por mi cuello alivianando el día.

Por fin el sol se introduce en el suelo con una brisa cansada

y la mariposa se queda dormida esperando la tarde

hasta que apareces tú, ella y la tierra de ayer

con su piel abierta

calculando el tiempo.

Las escamas que vuelan besan la mano creyéndose diosas

en la misma ruta de la pronta noche que se aleja de mi guarda

con el cabello que sin miedo se ensortijó 

dejando la sensación de ser anillos que caben 

completicos 

en los dedos del mundo.

GAP